Un hombre que aseguraba
no tener ningún problema mental, se le fue denegado el acceso al baño de un
Starbucks en la ciudad de New York. Por lo que decidió simplemente bajarse los
pantalones y hacer sus necesidades en el piso.
Después de defecar, el
hombre continuó caminando con sus pantalones abajo mostrando y al mismo tempo
todo.